Experiencias

Una agresiva especulación inmobiliaria ha transformado el paisaje tradicionalmente dedicado a la huerta del municipio de El Rafal, en La Vega Baja del Segura. Donde antes había naranjos y limoneros, ahora hay adosados clónicos, terrenos preurbanizados y grúas oxidadas de promociones inmobiliarias fracasadas. En este entorno desolador, el Estudio Grupo Aranea ha construido el Instituto Rafal como baluarte defensivo frente a un territorio hostil. Un oasis protegido por un muro de hormigón donde los chicos pueden crecer y formarse con referentes espaciales alternativos.