
Esta guía es una invitación a permitirnos sentir nuestro cuerpo, en bruto, y escuchar lo que somos, atrevernos a descubrir ese templo poderoso, ese paisaje maravilla de extensiones, planicies, huecos, rincones, esquinas y caparazones. Explorar ese cuerpo lleno de sorpresas y muy complejo que habitamos y con el que nos presentamos en el fuera y con el que sentimos el mundo. Reconocer lo que somos para después crear lenguajes con los que agitarnos, articularnos, menear, impulsar, saltar, abrirnos y entrar en contacto, tocar, empujar y acariciar otros espacios, otros tiempos y otros cuerpos.
Esta guía propone (primero) un momento para parar, y después un inventario de posibles relaciones constantes, y ofrece además un sinfín de juegos, preguntas, aventuras y listas para descubrir formas de sentir, jugar y poder moverse y mover así el mundo.